En el década de los 50‘s salió José Almeiro Pardo de un pueblo llamado nueva Segovia de San Sebastián de Caloto, donde su padre era mayordomo de la hacienda Bella Vista y su abuelo tenía una finca agrícola. Por ser liberales fueron desplazados a mediados del año 1958 y llegaron a una invasión en las laderas de Cristo Rey, que luego se llamó barrio Alberto lleras Camargo ubicado en el sur-oeste de Santiago de Cali en el departamento del Valle del Cauca en Colombia.
Su padre y su abuelo comenzaron a cargar agua a lomo de caballo, la cual se vendía a 5 centavos. Posteriormente la comunidad construyó el primer acueducto comunitario que surtía agua desde la parte alta del corregimiento de los Andes. Tiempo después las empresas municipales construyeron tanques de almacenamiento y así nacieron las pilas comunitarias. En los años 80´s llegó a estas laderas un instrumento musical: una conga y así comenzó a crearse un movimiento musical que tomó forma con la creación de la agrupación Son de la Loma. Entre 1999 y 2000 nació una personaje llamado LOMERITO, que era un Caballo que recordaba a los primeros colonizadores del lugar y así comienza el programa LOMERITO LECTOR (una biblioteca a lomo de caballo) en las laderas de Siloé.
A partir de allí, nace el símbolo de Lomerito, y es ahora el nombre con el que es conocido Almeiro por la comunidad. Lomerito es un artista popular, compositor, pintor y bailador que ha llenado la ladera con pinturas y compuesto canciones con su estilo particular. Almeiro es el gestor de varias iniciativas tales como “Las Calles del Arte” con LOMERITO y LADERITA y la “ESCUELA EXPERIMENTAL DE MÚSICA LOMERITOS”.
Hoy a sus 70 años, las personas de la comunidad y algunos profesionales que lo rodeamos queremos que su legado se fortalezca como parte de la historia urbana de Cali. Durante los últimos años se han dado pasos para el fortalecimiento de la sede de la “ESCUELA DE MÚSICA LOMERITOS”, tales como la consecución del lote y la realización del anteproyecto arquitectónico del centro.
A lo largo de este tiempo, la corporación ha brindado clases de música, danza, pintura, murales, lectura e instalaciones en espacio público para la población del barrio de Lleras Camargo. Una población atravezada por diversas problemáticas como el microtráfico, el desempleo y la violencia intrafamiliar, entre otros donde la cultura puede jugar un papel definitivo en la formación del ser desde los niños hasta el adulto mayor.
Actualmente, los esfuerzos de la corporación se han centrado mejorar su sede donde se puedan llevar a cabo actividades culturales, capacitaciones, y eventos de forma permanente.
El presente proyecto es un eslabón en la cadena de dicho sueño. Los estudios técnicos son la base para solicitar recursos ante un ente financiador.
Este será un lugar simbólico que represente nuestra lucha por sobrevivir y realizar nuestros sueños a pesar de todos los problemas que nos rodean. Será hecho 100% de guadua, piedra y tierra, lo cual representa nuestro deseo de utilizar nuestros valiosos recursos locales., A la cabeza del líder comunitario Almeiro Pardo Trochez, la corporación Lomeros’ ha venido liderando la actividad cultural en el barrio Lleras Camargo durante varias décadas. El barrio se encuentra ubicado en la ladera occidental de Cali (conocida como Siloé), siendo la primera área de invasión de la ciudad, habitada por población desplazada de la época de la violencia, proveniente principalmente del departamento del Cauca y el pacífico. Con el paso del tiempo, la ladera se ha convertido en un asentamiento representativo de las múltiples problemáticas sociales que se viven en la ciudad, sin embargo, muy pocas veces se visibilizan y promueven los sueños, iniciativas y esfuerzos que caracterizan a los habitantes del barrio. El proyecto actual nace de varios años de trabajo cultural, como muralismo, danza, música y pintura que se ha desarrollado espontáneamente en el espacio público, y que tras la consecución de un lote en 2017 con un trabajo de autogestión, ahora busca mejorar su sede a través de una propuesta en guadua, para ofrecer su actividad cultural de manera permanente.
Se cuenta con el anteproyecto arquitectónico, desarrollado voluntariamente por parte de los arquitectos Natalia Dulcey y Flavio Lucas, el cual se pretende desarrollar a través de un estudio de suelos, un cálculo estructural, un diseño hidrosanitario, un diseño eléctrico, la coordinación técnica arquitectónica, el presupuesto, la maqueta y los detalles constructivos de la escuela de música Lomeritos., El proyecto es claro en la definición del problema, antecedentes, sus objetivos específicos son medibles y alcanzables. Se sugiere revisar el objetivo general, y aunque que lógicamente se fortalecerá el cluster de música en el sector, eso solo se daría si se logra construir el proyecto;pero el proyecto que se está evaluando solo concibe la realización de los planos. El tiempo estipulado es acorde a las tareas. Brinda algunos detalles importantes en su plan de gestión.